Plum pox Virus (PPV) puede ser introducido a localidades libres del virus por medio de material de injertación o plántulas infectadas. Pero, también se transmite por inoculación con savia de plantas infectadas a través de áfidos. En Chile, el virus se encuentra presente en durazneros, damascos y ciruelos.
A pesar que en Chile, el Plum Pox Virus (PPV), está sometido a régimen de control obligatorio por el Servicio Agrícola y Ganadero (SAG), existen tres factores que constituyen un problema grave para las regiones donde se manifiesta la enfermedad el PPV. La rápida diseminación por medio de vectores, es el primero de los factores, mientras que le sigue los severos daños en los frutos que los hacen no comercializables; y tercero, que gran parte de las variedades son susceptibles.
Dentro del ejercicio protocolar -todos los años-, los viveros y todo aquel que tenga la intención de propagar material vegetal de frutales de carozo, debe declarar ante el SAG las plantas madres desde donde se extraerá dicho material. Estas plantas son analizadas por laboratorios autorizados, para demostrar la ausencia del virus. La aplicación efectiva de estas medidas permite evitar la diseminación del virus, asegura expertos.
Estudios arrojaron que en Chile se encuentra presente la raza tipo D (Dideron). Esta raza PPV-D, es la más común en Estados Unidos y países europeos, y afecta con igual grado de severidad a durazneros, damascos y ciruelos. Se caracteriza por no ser transmitida por semilla, dificultades de transmisión a huéspedes experimentales, baja eficiencia de transmisión por los vectores y es considerada como no epidémica.
Ante tal situación, se capacitó a productores de carozo de la comuna de Putaendo -Valparaíso-, sobre la importancia económica, características de la sintomatología, diseminación y manejo de la enfermedad de Sharka causada por Plum pox virus.
“La presencia del virus y el evidente daño en las plantas afectadas para los productores ha significado, especialmente en damascos, el arranque de numerosos huertos nuevos y antiguos”, afirma Mónica Madariaga Villarroel, especialista en virología, investigadora de INIA La Platina.
Villarroel explica que la presencia de PPV en las plantas afectadas puede causar una caída prematura de frutos y reducir significativamente la calidad de la fruta producida. “Las plantas de damascos, durazneros, ciruelos y nectarines infectadas con PPV producen frutos indeseados sin valor comercial”, `precisa.
La actividad es parte del plan de capacitaciones del proyecto Desarrollo de estrategias de mitigación para la enfermedad de Sharka, causada por Plum pox virus raza D, orientado a fortalecer y potenciar la cadena productiva de frutales de carozo en Chile. Esta iniciativa cuenta con el apoyo del FIA.
El estudio tiene como propósito determinar la situación actual de Plum pox virus en huertos y viveros de frutales de carozo presentes en las tres principales regiones productoras, que son la Región de Valparaíso, Región Metropolitana y Región de O’Higgins; y, contribuir al fortalecimiento de la cadena productiva de frutales de carozo mediante el desarrollo de una estrategia de mitigación de la enfermedad de Sharka.
Fuente: INIA.cl