La respuesta a la necesidad que tienen las organizaciones o instituciones de contar con un personal calificado y productivo, mediante conocimientos teóricos y prácticos que potencien la productividad y desempeño del personal, con beneficios comunes es lo que define la capacitación laboral.
Cada sector industrial tiene sus propias áreas y sectores definidos, donde -desde los más altos cargos y todo el personal- deben estar en constante capacitación para mantener las plantas en funcionamiento y al día. Los avances en tecnología, el crecimiento de las redes, la venta online, los cierres de negocios vía conversación en streaming es parte de lo que muchos ingenieros deben mantener un constante estudio.
La capacitación permite mejorar los conocimientos, habilidades o conductas y actitudes del personal de una organización… y de esta manera , los empleados disponen de nuevos conocimientos y herramientas para beneficio de ambos.
En la industria frutícola encontramos una gran gamma de oportunidades en la mejora de los trabajadores, tal es el caso del organismo técnico intermedio de Fedefruta, CapFruta y de la Fundación para el Desarrollo Frutícola FDF, entre muchos otros.
Trabajadores satisfechos por factores ajenos a lo monetario. En el estudio denominado “Situación de la mano de obra agrícola en Chile y perspectivas a futuro”, desarrollado por el académico del Departamento de Economía Agraria de la PUC y empresario agrícola, Juan Pablo Subercaseaux, reveló que, a propósito de la escasez de mano de obra en el sector frutícola, existen incentivos no remunerados que son relevantes para mantener motivados a los trabajadores y evitar su migración a otras ramas de la economía, como el comercio, la construcción o la minería.
Entre los factores que Subercaseaux menciona, están la valorización del trabajo, el respeto, la igualdad, el clima laboral y la capacitación. Este último, aparece como altamente apreciado por los consultados, ya que implica una instancia de aprendizaje y actualización de conocimientos que abren nuevos horizontes laborales y con costos mínimos para la empresa.
Ante tal situación, el organismo técnico intermedio de Fedefruta, OTIC CAPFRUTA pone de relieve la oportunidad de fidelización que tienen los empresarios frutícolas si capacitan debidamente a sus empleados, siempre y cuando lo hagan en el marco del programa IMPULSA PERSONAS, la cara renovada de la Franquicia Tributaria de Capacitación.
“Impulsa Personas” beneficia a trabajadores y empresas
El programa que Capfruta acerca a los empresarios agrícolas, contribuye al aumento de la productividad de las personas, trabajadores/as y empresas, y al mismo tiempo impulsa el desarrollo económico y social del país. «Se trata de un incentivo tributario del Estado, con el que las empresas pueden financiar la capacitación laboral y la evaluación y certificación de competencias de mujeres y hombres mayores de 15 años, sean trabajadores/as o personas no vinculadas a la empresa, aportando a la sostenibilidad y crecimiento de éstas. Más información en http://www.fedefruta.cl/que-hacemos/capacitacion/